sábado, 29 de noviembre de 2008

MIRADAS REFLEJADAS. Jaén, Diciembre de 2008

MIRADAS REFLEJADAS

En mi primera exposición individual en la Escuela de Arte de Jaén, mi maestro don Francisco Carrillo hacía referencia a la manera en que yo utilizaba la acuarela, indicaba que era un medio para retener lo observado, lo mirado, lo pintado; no como impresiones sino como sentimientos y vivencias.
Hace tiempo emprendí sin ser del todo consciente de ello, una especie de búsqueda, quise dirigirme al encuentro de la complejidad que me supone el acto creativo a través de la observación, de la mirada, del registro. Trabajo que he abordado “buscando” y repasando lo buscado para volver a mirar lo buscado, conforme a un planteamiento: el encontrar, o quizá simplemente descubrir a través de un proceso contenido por la curiosidad, la experimentación y la investigación,
Percibir es recordar, pero al mismo tiempo pertenecer, ser partícipe de esa sensación.
El proceso práctico de crear algo entabla un dialogo con el propio ser. La conclusión de este dialogo puede considerarse como una formulación concreta ante el mundo. El arte en general nos ayuda a entender el mundo en el que vivimos y cómo nos relacionamos con él aunque a la vez pueda concebirse también como un lugar de enfrentamiento a nuestro propio abismo insondable.

CONSTRUIR-DECONSTRUIR

La elección del material se revela como parte esencial de un programa estético, de mi propósito. Las cualidades expresivas del material son importantes y en algunos casos muy dominantes; las cualidades físicas, plásticas y conceptuales de la acuarela, su presencia a través de la transparencia e interrelación con el soporte hacen de esta técnica el medio, la herramienta que más a menudo voy a utilizar y que más satisfacciones me ha reportado.

Construir por medio del dibujo y deconstruir a través de la mancha para volver a construir puede ser algo realmente muy intimo, puede suscitar placer o armonía independientemente de que estimule emociones, e imaginación, o que atraiga de una manera fría y distanciada a través de la belleza y el desinterés por la re-presentación.
Aspectos del proceso de la obra me conducen a nuevas obras, a nuevos posicionamientos. Utilizo el contenido de la experiencia para que se revele como algo conocido, para así después intentar cuestionar la validez de esa experiencia.
Me pregunto si lo bonito, lo bello me impone una serie de obligaciones que hacen desaparecer el descubrimiento, la búsqueda, el juego, la otra mirada.
La artista Agnes Martin declaraba:”la belleza es el misterio de la vida. No está en los ojos sino en la mente [...] Toda obra de arte trata de belleza. Todo arte negativo protesta por la falta de belleza de nuestras vidas”.

NICOLÁS ANGULO